Gracias por preocuparse por nuestras almas, pues estos ejercicios realmente me estan ayudando tanto, a recordar quien soy y para que he sido creada, quisiera poder abrazar a nuestro Señor en Getsemani, consolarlo, y no quiero volver a pecar jamás, ojalá el mundo despertara y se diera cuenta cuanto lo lastimamos con nuestros actos, y a la vez hay que sentirnos felices porque tenemos un Padre que nos ama tanto, y es tan misericordioso, y nos espera en la vida eterna para abrazarnos, espero en El, que muchas personas hagan los ejercicios, para que sean libres. Dios les bendiga mucho.