Tuve mucha paz cuando terminé los EE y al hacer el examen final pude sopesar que: El año 2013 hasta el día de navidad inclusive había sido el peor año de mi vida. Sin embargo, durante los EE del 26 al 31 de Diciembre, el Señor tocó muchas cuerdas de mi alma. Y pude concluir que el 2013 fue un buen año. Un año de tribulación y de purificación, un año donde Dios preparó la tierra para volver a sembrar una vez más en mi corazón… Rafael